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martes, 29 de abril de 2008

BIENVENIDOS

Bueno, quizá alguno de ustedes ya hayan tenido el infortunio de toparse con uno de mis blogs. Así que les agradezco su interés (mórbido asunto por el que están aquí, o como quieran llamarle). A ellos les doy una gran rebienvenida (y no es albur).

A los que están aquí por primera vez, les doy la más grata bienvenida, y mi agradecimiento sincero y cariñoso por tomarse la molestia de pasar unos segundos o minutos fragmentados con otras ventanas más interesantes que la de su servidora.

Realmente no me interesa saber por qué están aquí. Basta y sobra con que hayan pisado esta página, tan mía como las otras, pero mucho menos melosa que las demás. Eso estará garantizado, si no, pues la tendría qué borrar.

Y es que precisamente ésa es la razón por la cual me decidí a realizar un nuevo blog: para llenar de letras a quienes me honran con su visita. Con letras que provengan de mi razonamiento y análisis irónico y sarcástico porque -ah sí, aunque Usted no lo crea- yo también tengo hartos momentos de toneladas de ácidos comentarios, análisis racionales y argumentos lógicos que por no coincidir con mi personalidad emotiva -aquella que es melosa y que siempre le está escribiendo a amores no correspondidos, pasados non gratos y recuerdos agridulces de la adolescencia- preferí no mezclar.

De que habrá comentarios tontos, los habrá. Soy simplona por naturaleza. Y de que tendremos letras deprimentes, taciturnas y lloronas, también.

Pero también encontrarán con otras letras más bien sarcásticas, críticas de su entorno. El mío. Le presto en este blog las letras a la Marlén iracunda y callada que no sale a manifestarse con pancartas porque sabe que eso no arreglará al mundo. Ella es más introspectiva, y aunque no confía mucho en eso de las fantasías, sí que tiene fé en los sueños, pues ella vive en uno de ellos. Y de que es tiernona, eso que ni qué. De que tiene accesos de depresión y melancolía, también.

De antemano les digo que mi página no tiene la más mínima intención de mover masas de irredentos, insurrectos o rebeldes. Ella es rebeldía razonada por convicción. Ella cree que el cambio está en el conocimiento y en los juicios de valor certeros. Le asustan los movimientos políticos, porque sabe que de ellos ganará todo, menos lo que desea: un mundo mejor. Ella prefiere, por el contrario, desquitarse escribiendo, desahogarse enmedio de la tempestad, antes que invitar a tirar bombas o escribir sentencias amenazadoras.

Ella cree en la juventud. Sabe que es la única salida ante tanta corrupción...y vaya que ya no está tan joven. Sin embargo, es una bromista de la vida.

Ella y yo, que al final de cuentas somos la misma, les damos las gracias, una vez más, por estar aquí. Se acepta de todo, menos invitaciones a mítines para apoyar a cualquier partido. Ella no cree en la política actual. Es más: casi no ve las noticias.

¡Reciban todos ustedes un ciber abrazo!

Marlén y Marlén