Un rayo de miel atraviesa a la hora de la canción sagrada de la noche. Es la tela donde duerme la voluntad de una mujer bendiciendo su visión que ya no es más plegaria:
Algún día la Tierra volverá a ser un papalote y sus herederos reirán sobre sus cuatro vórtices, formando la cuna donde empieza el viento y los colores saben a sus nombres -todos tienen el color primario del amor-. Algún día nuestros hijos han de devolver las notas exactas del universo con sus bocas tibias.
Algún día la Tierra volverá a ser un papalote y sus herederos reirán sobre sus cuatro vórtices, formando la cuna donde empieza el viento y los colores saben a sus nombres -todos tienen el color primario del amor-. Algún día nuestros hijos han de devolver las notas exactas del universo con sus bocas tibias.
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