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martes, 29 de julio de 2008

Burocracia, alza la voz que no te escucho.

Total, que hoy por fin me hice a la idea de que tenía que regalarle 200 pesos a mi nueva alma mater. ¿La razón? Un triste examen médico que no tiene nada de examen -y mucho menos, de médico-, con valor de "encuesta".

Traducción: "no estamos contentos con cobrarte la inscripción, como no tenemos de dónde arañarte, te haremos una encuesta en donde te preguntaremos cuánto pesas, cuánto mides y si tienes sida, diabetes o no".

No me sacarán sangre. No creo que les importe de verdad si estoy enferma o no. Afortunadamente (para mí) no lo estoy.

Pero sí estoy algo sentidona. No sé si traeré síndrome premenstrual, o mi luna en cáncer (otra vez dale con la estúpida astrología) o si mi ascendente en piscis (dale, te digo...) me traían toda achicopalada y susceptible, el caso es que hoy me sentí muy mal con el trato que me dio una señora de la ventanilla de la facultad de medicina, al querer adquirir mi ficha para que me den una fecha (facha, focha y fucha no están incluidas) para que me pregunten por qué diantres mi madre perdió el carnet en donde mi pie de recién nacida está impreso con tinta azulácea y dice mi peso y estatura al nacer.

Me dijo "¿no ves la hora que es?, las fichas las vendemos de 8:00 a 10:00 AM"... Y cuando yo le respondí que en la información en internet decía que era de 9:00 AM a 12:00 PM, me dijo, insistente y grosera: "por eso, niña, pero ¿qué hora es ya?".

Faltaban 10 para las once.

Quise llorar (raro en mi... en serioooo, cuando estoy afuera lo capricorniano -y dale con la trinche astrología, carajo- me sale requetebien), pero obvio, no lo hice.

Me da tristeza que la burocracia sea siempre tan mamona. Que la gente esté cansada de trabajar y ni siquiera lo haga bien. Que a los que trabajan bien, los corran (hola). Que el mundo esté tan ensimismado que ya ni siquiera una sonrisa puedan dar.

Ni modo. Mañana le llevaré un cafecito bien cargado a la señora intolerante, a ver si ahora me perdona mi hermosa cara y mi desafortunada situación de guiarme por lo que una pinche página de internet no actualizada me dio.

Bueno... y a todo esto... ¿alguien leerá lo que acabo de decir?

Eco, eco, eco, eco...

Menos mal que no.

1 comentario:

mike dijo...

eco eco.

No creo que te sorprenda saber que yo lo he leido. ;)